Betty vuelve con una cosa clara en mente, que no es otra que merendarse el gigantesco rabo de Jesús de nuevo: Betty viene de nuevo para que disfrutemos ese cuerpo de gimnasio rematado en un culo milagroso que no nos cansaríamos de ver, y sobre todo, de tocar :-D Para Bety, además, las experiencias deben ser Hardcore o si no nada; en su entrevista confiesa que para ella, que le gusta que le agarren, la sujeten y se la follen con la mayor dureza posible. Pues bien, hoy Bety volverá a encontrarse con su pollón soñado, a confesar que no se acordaba de lo grande que era y disfrutarlo como la primera vez. ¡Justo lo que esperamos ver