Cuando Jennifer, que así se llama, ve a Bobelo en la esquina le extraña un poco ver a una especie de semi-otaku aislado de 20 años, pero su padre se encarga de tranquilizarla, y poco a poco, van hablando del chico (que hace como que no escucha nada): «El pobre no ha conocido mujer a sus 20 años». Así su papi va ablandando el corazón de esta limpiadora latina. Y antes de irse, lanza la oferta: «¿No crees que tú podrías enseñarle un par de cositas y despertármelo un poco?» Jennifer duda, pero accede: ¡Le puede el morbo de darle una lección a un jovencito casi virgen! Así que en cuanto se va el padre, el juego comienza! Jennifer va a directa a Bobelo para enseñarle. Y Bobelo se va directo a sus enormes tetazas latinas, como haríamos todos nosotros jejeje. Y por fin viene lo que viene. ¡La definición perfecta de «Latina caliente»! Resulta que esta limpiadora latina venía con varias lecciones aprendidas desde casa ;-P
