Nos colamos en la vida rutinaria de Marina Gold. Como hacen un gran número de españoles, los domingos son para descansar y aprovechar para hacer la colada, se recoge toda la ropa que hay desperdigada por la casa y se mete en la lavadora para que salga limpia y reluciente. Lo que Marina no podía imaginar, es que cuando estaba metiendo la ropa en el tambor… iba a sufrir una empotrada en toda regla! Un compañero de piso la ve a cuatro patas y no puede reprimir sus instintos .. no me extraña… bufffff menudo culazo por favor